• UPTA y UNIÓN DE MÚSICOS alertan del agujero en las cotizaciones de los músicos y otros profesionales de la cultura 

Las empresas de facturación de actuaciones han hecho su particular agosto en los últimos años, como consecuencia de la situación a la que se han visto avocados miles de músicos y profesionales del sector de la cultura para poder desarrollar su actividad.

Esta cuestión ha sido denunciada reiteradamente por UPTA y la Unión de Músicos, y como ejemplo de ello están las últimas actas de liquidación de cuotas de una empresa a la que tan sólo en el año 2022, reclaman casi 6 millones de euros de diferencias de cotizaciones sobre las liquidaciones realizadas a la Seguridad Social.

Desde las organizaciones llevamos meses tratando de trasladar a la Seguridad Social la anomalía que hemos detectado y la posible solución que pasa porque miles de músicos y otros artistas puedan regularizar su situación de forma definitiva a través de una cotización al RETA acorde a sus ingresos reales y también pasa por garantizar que cuando no actúen como autónomos sean los empleadores reales quienes les dan de alta y no las empresas intermedias de facturación.

En este caso hemos presentado, hace meses, una propuesta que establece una cotización reducida para todos aquellos profesionales del sector con bajos rendimientos al hilo de la cotización especial para artistas del Estatuto del Artista aprobada en el Real Decreto Ley 1/2023, de 10 de enero, de medidas urgentes en materia de incentivos a la contratación laboral y mejora de la protección social de las personas artistas.

Eduardo Abad, presidente de UPTA, “con esta modificación en el tramo más bajo de cotización al RETA, podríamos regularizar unos 200 mil profesionales de la cultura, lo que supondría una recaudación a la Seguridad Social de casi 170 millones de euros anuales.  En las próximas semanas analizaremos con los responsables del Ministerio la situación actual de este sector de actividad y las soluciones urgentes que deben ponerse en marcha para resolver esta anomalía del sistema que tiene consecuencias muy graves en la afiliación y la recaudación de nuestro régimen de cotización”.